viernes, mayo 18, 2007

Jugo por la mañana

Con mis amigos de mar de Copas de fondo, pensaba cómo un olor, un sabor, o una canción te puede llevar directo a un momento de tu vida, hoy por la mañana bebía un jugo, y aunque antes ya lo había hecho, no sé por que recordé justo hoy, cuando era muy pequeña, y mi padre, haciéndo un esfuerzo, nos compraba a mi hermana y a mi, un néctar de durazno de la marca Watts, era delicioso, esperába con ansias ir de su mano a comprarlo; hacía frío, habían días de mucho sol también pero solo recuerdo los días fríos.

El siempre estába ahí, aunque nunca habló mucho y las palabras cariñosas, las dejaba salir luego de permitirle el paso a unos cuantos tragos (espero nunca callarme un te quiero, hace falta decirlos y escucharlos también) , a veces hacía promesas, que parecían imposibles de lograr, cómo llevarnos a dar un paseo o comprarnos unas manzanas de caramelo en el Play Land Parc, ya era bastante gasto las entradas y los juegos, como para venir a pedir manzanas de caramelo, pero a veces lo conseguía y con unas niñas felices y dormidas en el asiento trasero del carro prestado (a veces pensaba que era nuestro excepto, cuando hacíamos planes y el verdadero dueño se lo llevaba ), regresábamos a casa.

Cuando era niña sufría de insomnio y solia irme a la sala a ver tele con mi papá, veíamos a Alfred Hitchcock, supongo que verlo no me devolvía las ganas de domir, pero me gustaba mucho, y él me preparaba un cafecito ralito no más, por que sino no dormirás me decía, yo lo bebía contenta.
Lo que mas detestaba era cuando salía con los amigos, por que el insomnio se prolongaba hasta su regreso, la sensación de no poder dormir me hacía llorar sin darme cuenta; a veces sólo estábamos mis hermanas y yo en la habitación pequeña, y lo más desesperante para el que no tiene sueño, es oir lo bién q duerme el resto, el descanso total, el olvido del día y el pase libre hacía los deseos escondidos, recuerdo el ruido exacto que hacía su llave en la puerta y la cantidad de licor que había bebido por el sonido de sus pasos, muchas veces se acostaba con la ropa puesta y yo fingía dormir, entonces secaba mi cara con la almohada.

La habitación era pequeña la cómoda vieja y había en ella un cajón que parecía una caja grande, en la que entraba cuando jugaba a las escondidas, dejába de ser un simple cajón para ser la puerta hacía otro lugar, a veces el deseo de escapar era muy grande, hay cosas que pasé que desearía no recordar, pero están ahí guardadas bajo muchas llaves, y que hoy un simple jugo de durazno dinamitó la puerta de esas memorias dejándolas en libertad. Mientras el hielo de la bebida se derrite y esta se acaba el recuerdo vuelve lentamente a la habitación lejana y se encierra de común acuerdo, atrapo con mis manos las noches de cafecito, Alfred H y manzanas de caramelo, deseo que ellas permanezcan a mi lado un rato más...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Los recuerdos acompañan, pero también consumen, consumen vida y la visión de lo positivo venidero. También recuerdo los momentos con los viejos pero pienso en que algun día mis hijos serán más felices. Saludos desde las cenizas, again?

Valeria Elías dijo...

esos son los recuerdos que no dicen quienes somos y de donde venimos, nunca debemos olvidar esos pequeños momentos y detalles... besos

Anónimo dijo...

Wow, un mero jugo fue dinamita de la memoria... que bello es recordar, lo bueno y lo malo, despues de todo uno simpre puede decir triunfalmente: ya paso.

Y seguimos aquí, pese a todo, y gracias a todo...

Cuidese...

RacuRock dijo...

asuu jugo de nectar que rico.. pero como no duermes si tomas cafecito.. ayayay.. bueno mi hija nunca me era entrar borracho a la casa.. no tomo niun agotita.. es bueno recordar y abrir su cajita de vez en cuando..

El Gran RacuRock

Monarcaxx dijo...

Pues sip a veces una pequeñes nos transporta a recuerdos que preferimos guardar...pero sabes no son del todo malos pues tambien recurdas lo bueno.

Imaginar cosas cuando una es niña a pesar del ambiente jeje ahora de grande dibuja un sonrisa en el rostro, pues un niño siempre se las ingenia para vivir la niñez que se debe...todo tiene el lado positivo, pues quizás se aprende de todo ello y también los demás...ves.
Un abrazote Cinder :)

Rolando Escaró dijo...

los recuerdos son un camino por el que ya hemos transitado querida cinder, de ellos solo podemos rescatar la sensacion del viaje, pero no el viaje mismo

el futuro depende de ti!

Dinorider d'Andoandor dijo...

jaja

con Hitchcock como que algo difícil creo, un maestro del suspenso