martes, enero 17, 2006

El espejo

Sentía que brotaba caliente por la comisura de sus labios un río rojo, que lejos de provocarle dolor en el rostro, le quebraba de a poco el alma.

Ella observa el anillo q llevaba con orgullo en un época no muy lejana, ahora manchado de sangre, le restrega contra la cara, que aquel hombre q duerme a su lado ya no era el que conoció o creyó conocer, sus manos ya no servían para acariciarla, y esas piernas ya no le daban calor, sólo temor al escuchar sus pasos tambaleantes luego de una noche de juerga, acercarse con el aliento avinagrado, susurrarle al oído con esa voz vieja macerada en alcohol, que esa noche tendría un poco de acción, sin importarle si estaba de humor; el olor rancio a cantina y a aserrín le provoca arcadas, intenta disimularlas dándole la espalda, ya no recuerda cuando fue la última vez que lo hizo por q lo deseaba, mirando su cara en el baño, hoy sólo siente asco de sí misma, mientras quita con la toalla esa mancha roja que tiene sobre los labios, que por más q frote nunca saldrá.

lunes, enero 09, 2006

El lava maldito!

Recuerdo que al poco tiempo de iniciarme en mi nueva chamba, me tocaba abrir con el director, la noche anterior a ese día, me sentía muy nerviosa, no pude conciliar el sueño hasta mas de las dos de la mañana, y debía despertarme a las 6, sólo me quedaban 4 horas de sueño, claro sueño sobresaltado y nada reparador.

Desperté a las 5 y media, deseaba aprovechar la última media hora q aún me quedaba en la cama calientita, y con los ojos abiertos cómo platos me quedé hasta las seis, con mucha pereza y con ningún deseo de ir al trabajo me subí al autobus, en el camino cabezeaba un poquillo, pero al escuchar proxima parada ---, pués casi como una máquina bién aceitada salté de mi asiento y me puse de pie junto a la puerta q se abría, caminaba por las calles y cinco minutos después estaba parada en la puerta del local, las luces estaban apagadas y yo saqué un libro en ese momento leía, El Código Da Vinci, y muy metida en mi lectura olvidé q hacía frío, al los diez minutos apareció mi jefe con una sonrisa cachosa: ¡Qué te echaron de casa o qué!, y yo le dije: lo q pasa es q llegué muy temprano, sin mediar más palabra abrió la puerta y subimos la persiana, tengo q sostenerla, por que esta está malograda y se cae, el subíoa la tercera planta y me dejó sola, debe preparar las pastas y los bocadillos, yo mientras tanto debo acomodar todo, las vitrinas, los lava vajillas, la chocolatera etc...y claro no olvidar montar todas las mesas con sus respectivas sillas en la calle, terminé lo más pronto q mis inexpertas manos me permitieron, ya con el uniforme estaba lista para recibir la bajada triunfal de los bocadillos y demás q servirían para calmar el hambre de los comensales, q haciendose siempre los muy educados terminan dejando todo cómo un chiquero, jajaja; mi jefe bajó preparó dos cafés con leche y me dijo ya puedes abrir, tomé mi cafecito muy rápido y levanté la persiana, nadie entraba, y el me dijo parece q haz traido mala suerte y volvió a reirse, yo no le respondí, sefue a hacer el ingreso al banco y me dejo sola, entraron tres personas y yo trabataba de estar serena, los atendí a todos y él regreso- voy arriba me llamas cualquier cosa-, alcancé a escuchar cuando vi como desaparecía, regresó mi tranquilidad, y a la media hora comenzó a entrar gente, entraban y yo no sabía q hacer, se me pasó por un momento decir está cerrado y bajar la puerta, pero no podía, intentaba antender lo más pronto posible, y la desesperación poco a poco se apoderaba de mí!, recordé q no le había echado el líquido especial al lava vajilla y se lo puse una copita chiquita recordaba q me habian dicho, en todo ese ajetreo bajó mi jefé, molesto por ver q no hice caso a lo q me dijo, preguntó frenético q te falta?, sólo esto eran dos notas no mucho, pero todos los platos y tazas sucios comenzaban a acumularse, y ya casi no tenía en donde servir, el comenzó a lavr todos los platosminetras yo atendía y en eso escuché un peuqeño grito ahogado, era él, q fúrico me miraba, sentía q de haber podido me hubiera derretido, QUÉ LE HAZ METIDO AL LAVA- VAJILLAS, terminaba de procesar todo y volteo me quedé de una sóla pieza al ver cómo mi peor pesadilla se volvía realidad, horrorizada veo como la espuma crecia y se salía por la puerta cerrada del lava, él me miraba yo corría para traer un trapeador y secar, pero las notas se acumulaban, y las personas esperaban sus pedidos, y no sabían la guerra q emprendía contra el lava maldito!, intentaba olvidar la espuma q veia q salía y atendía; la gente comenzó a bajar junto con la furia de mi jefe, y él giro y me pregunto q demonio le pusiste a esto?, yo le contesté una copita chiquita de esto señalando un envase, y con un suspiro me di cuenta q era el frasco equivocado, chess, ese no es, ese es concentrado, es este, sañalando uno igual, pero con la tapa de otro color, para la próxima pensé, y me reí, pero claro interiormente, la mañana terminó sin más sobresaltos, y ya casi se acercaba la hora en que debía dejar mi turno, tremenda performance q hice!!!

lunes, enero 02, 2006

Polaroid

Caminaba por la calle con mi chaqueta de cuadros y con mi pantalón de color grafito q me quedaba dos tallas más grande de lo q debería, todo por q mi madre no le gustaba q use jeans ajustados, no entiendo, igual q resaltaria si estaba mas flaca, bueno épocas ajenas ahora, no sé por q ese recuerdo me asaltó, andando por la calle cómo siempre lo hacia sin rumbo fijo sólo andar, tarareando canciones en mi mente sin percatarme del ruido de las calles, y sin saberlo alguién me observaba muy atento a mis movimientos, yo en colores, yo sentia al revés yo en blanco y negro, pero para él nunca fue así, y eso me alegra, las noches pasaban y las conversaciones una más estúpida q la otra de boca de gente q se decia amigo mío, pero no era cierto y yo lo sabía, nunca me engañé, estaba parada en ese lugar, pero mi mente vagaba por la acera y se reía de las cosas q decian, a veces la risa era muy fuerte y se tornaba audible para ellos, me miraban y yo me disculpaba diciendo q era por un chiste q recordé, inmediatamente decia q era mala para contar bromas y me salvaba de tener q decirles q era de ellos de quién yo me reía, jajaja, hasta ahora cuando lo recuerdo me da gracia.

Y un día muchos años después, aquel q me observaba, dejó de hacerlo de lejos y pasó a formar parte de mi piel, de mi cuerpo; con un beso suyo dejé de pensar q yo andaba en negativo, pasé q creer con fuerza q yo también nací a colores en ese mismo instante, poco a poco pude ver q el color, cómo en una tranfusión desde sus labios fluía hacia mi cuerpo y me llenaba de colores brillantes, era de noche cuándo dejé de ser una fotografía de los 40`s.Te amo por eso!!!