sábado, octubre 23, 2010

Un par de nuevas botitas

Es increíble como la vida te puede cambiar con un llamada,con una foto, una conversación en fin de diferentes maneras, pues para mí fue así, desde la última vez que escribí en este espacio, mi vida dió un vuelco de 360º, no de 180 fue un remolino total, a pesar que fue un remolino buscado, muy esperado, muy profundo sentía que quizá no me pasaría a mi, esa alegría estaba muy lejos de volverse realidad, pero pasó, fue un proceso increíble, de saber que estaba ahí, pero aún no te movías a despertarme por las noches por las tremendas patadas que dabas jajaja, a veces deseaba q se durmiera un poquito y me dejara pegar el ojo, pero eso fue imposible desde los seis meses, ese fue el inicio de mi falta de sueño, o de intervalos de falta de conciencia durante el día en los que me sumergía en un limbo delicioso donde estabas tu con tu dulce mirada, y los dos flotábamos, hasta que por undécima vez debía ir al baño, pero más allá de las incomodidades que fueron muchas, todo era superado por el hecho de saber que erá mamá desde que me dijeron que estábas en mi, creciendo y haciéndome la mujer más feliz del mundo, pude compartir con tu papi la alegría de tu llegada, que será un post entero, por que eso de dar a luz de parto natural, y no me refiero con esto a la falta de cesárea no, no , no, totalmente natural, nada de analgésicos para aliviar ese dolor que de verdad fue muy fuerte, terrible, pero luego te vi y supe que serías mi niño por siempre, una nueva energía me llenó el interior, agregado a la ausencia momentánea del dolor, fue mágico, me miraste y no pude evitar llorar de emoción,luego en mis brazos y cuando te llevaron para bañarte sentí un gran vacío, pero volviste para no volver a irte; se que algún día no será asi, pero por ahora solo me encargaré de disfrutar cada instante contigo y con tu papi, los tres, viviendo esta nueva aventura de ser padres, te amo hijo y a tu papi por haberme dado el mejor regalo de la vida...