miércoles, marzo 28, 2007

Bebiendo

Hace dos horas que llegó, la mesa de siempre y la copa de cogñac.
Agarra el peridódico, pero esto no sirve, se prepara para su viaje diario a las tierras del pasado, los papeles flotan en el aire espeso de su cigarrillo, una a una las frases de este se escapan de la esclavitud y vuelan libres por su mente.

La copa luce abandonada en la esquina de la mesa y sus manos inmóviles.

Viudo hace mucho, olvidó para para que sirve la sobremesa, se responde en silencio preguntas que nadie sabe.
Permanece petrificado, cómo unido al asiento, no sabe que lo observo; las marcas en su piel forman surcos profundos, no sé su edad, sólo que es un anciano casi, y su voz inaudible, ¿farinigitis crónica?, ¿entubamiento de emergencia que le malogró las cuerdas vocales?, lo ignoro, quizá es su hábito de no hablar. Hacen suficiente ruido los pensamientos y las conversaciones q se agolpan sin orden, ensordecedoras lo hacen girar en todas direcciones, para saber si alguién más puede escuchar, pero ve con un poco de angustia que nadie nota su presencia, quizá me hago transparente pensó, pero descubre que otro señor le sonríe y lo saluda, amigo de antaño, el responde mecánicamente a la sonrisa, pero ya no lo recuerda, su rostro es un inmenso borrón en su memoria, cómo todo lo que lo rodea, la copa de cogñac, el servilletero, la mesa la música de la radio.
Sus pies se mueven y se da cuenta que debe regresar a lo real, cada vez es mas duro hacerlo, quizá uno de estos días ya no vuelva, la copa se quedará empolvada en un rincón y nadie lo recordará...yo sí.

4 comentarios:

Jota dijo...

Es facil identificarse con una historia asi, que me ha gustado y debes seguir haciendolo (eso de escribir.

A mi tambien me can los cuentos cortos, creo que con ellos tengo mas pericia, una novela pienso que aun me queda muy grande.

Saludos y suerte.

Pao

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Cinder, receurdo tus posts contando tus lecturas de la saga de "Fundación". Creo que cuando a uno le gusta leer, de protno quiere escribir y si se decide a hacerlo constantemente, ya no lo deja...

:)
gran salute . Chao.

Rolando Escaró dijo...

asi son los viajes al pasado cinder, llega un momento en el que el presenta ya no existe y ya no tiene sentido regresar

MeTis dijo...

quizas mientras tu le recuerdes el volvera. A mi me pasa con un viejecito de mi barrio, siempre le busco y auque algun dia temo no verle mas, al dia siguiente esta ahi fuera, tendiendo su ropa en la cuerda solitaria...

saludos